Opera Metro con trenes que datan de 1968
El titular, Francisco Bojórquez reconoció que el Sistema de Transporte Colectivo padece un importante rezago tecnológico y costoso de mantener
Notimex
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CIUDAD DE MÉXICO, 09 de noviembre.- El Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro padece un importante rezago tecnológico, pues existen trenes que datan de 1968 y cuyo pilotaje electromecánico es costoso de mantener y no hay refacciones en el mercado, reconoció su titular, Francisco Bojórquez.
Entrevistado luego de develar el boleto conmemorativo de los 40 años del Conacyt, el funcionario explicó que en los últimos cuatro años se ha tratado de avanzar en el abatimiento de dicho rezago, para lo cual se requieren inversiones millonarias.
Asimismo consideró que en administraciones locales anteriores prácticamente no se hizo nada para dotar al Metro de los principales adelantos tecnológicos y fue hasta el gobierno de Marcelo Ebrard cuando se comenzó a invertir para cerrar la brecha tecnológica.
Indicó que ingenieros de este transporte concretaron varios proyectos tecnológicos con éxito y generaron al menos 20 patentes y otros se desarrollan en coordinación con instituciones de educación superior, lo que ha permitido abatir costos.
Sin embargo, Bojórquez Hernández reiteró que existe un importante rezago tanto en instalaciones como en trenes, 40 de los cuales fueron adquiridos cuando se inició la construcción del Metro en la ciudad de México a finales de los sesenta.
En la actualidad existe un problema enorme con el mantenimiento del sistema de pilotaje automático 135 que es totalmente electromecánico, pues comenzó a operar en el Metro hace 41 años y en la actualidad no hay proveedores de refacciones en el mundo, precisó.
Señaló que en el Sistema de Transporte Colectivo se planteó la necesidad de cambiar este pilotaje a uno electrónico con lo cual se disminuirían los espacios que utiliza, el consumo de energía, fiabilidad y minimizar costos.
Además hay 40 trenes modelos 68, los cuales "no podemos tirar" porque siguen operando, la mayoría de ellos en la Línea B que corre de Buenavista a Ciudad Azteca, pero principalmente porque estos trenes pueden ser modernizados y tener una vida útil de otros 50 años, añadió.
El funcionario aclaró que a pesar de su antigüedad y del esfuerzo que se debe desplegar con tecnología propia para dar mantenimiento a estos trenes, no representan un riesgo a los usuarios sino altos costos.
Refirió que el mantenimiento de la totalidad de las instalaciones y trenes del Metro representó este año un costo de cuatro mil millones de pesos.
Bojórquez Hernández señaló que de acuerdo con análisis del propio Metro, introducir adelantos tecnológicos hechos en México podrían reducir hasta en 40 por ciento los gastos que se hacen por compra de refacciones y otros equipos de mantenimiento, sobre todo en el área de electrónica.
Expuso que una vez que se concreten los proyectos que se tienen con las instituciones de educación superior, financiados con fondos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) en unos seis años, se podrían abatir costos de financiamiento hasta en 30 por ciento
Entrevistado luego de develar el boleto conmemorativo de los 40 años del Conacyt, el funcionario explicó que en los últimos cuatro años se ha tratado de avanzar en el abatimiento de dicho rezago, para lo cual se requieren inversiones millonarias.
Asimismo consideró que en administraciones locales anteriores prácticamente no se hizo nada para dotar al Metro de los principales adelantos tecnológicos y fue hasta el gobierno de Marcelo Ebrard cuando se comenzó a invertir para cerrar la brecha tecnológica.
Indicó que ingenieros de este transporte concretaron varios proyectos tecnológicos con éxito y generaron al menos 20 patentes y otros se desarrollan en coordinación con instituciones de educación superior, lo que ha permitido abatir costos.
Sin embargo, Bojórquez Hernández reiteró que existe un importante rezago tanto en instalaciones como en trenes, 40 de los cuales fueron adquiridos cuando se inició la construcción del Metro en la ciudad de México a finales de los sesenta.
En la actualidad existe un problema enorme con el mantenimiento del sistema de pilotaje automático 135 que es totalmente electromecánico, pues comenzó a operar en el Metro hace 41 años y en la actualidad no hay proveedores de refacciones en el mundo, precisó.
Señaló que en el Sistema de Transporte Colectivo se planteó la necesidad de cambiar este pilotaje a uno electrónico con lo cual se disminuirían los espacios que utiliza, el consumo de energía, fiabilidad y minimizar costos.
Además hay 40 trenes modelos 68, los cuales "no podemos tirar" porque siguen operando, la mayoría de ellos en la Línea B que corre de Buenavista a Ciudad Azteca, pero principalmente porque estos trenes pueden ser modernizados y tener una vida útil de otros 50 años, añadió.
El funcionario aclaró que a pesar de su antigüedad y del esfuerzo que se debe desplegar con tecnología propia para dar mantenimiento a estos trenes, no representan un riesgo a los usuarios sino altos costos.
Refirió que el mantenimiento de la totalidad de las instalaciones y trenes del Metro representó este año un costo de cuatro mil millones de pesos.
Bojórquez Hernández señaló que de acuerdo con análisis del propio Metro, introducir adelantos tecnológicos hechos en México podrían reducir hasta en 40 por ciento los gastos que se hacen por compra de refacciones y otros equipos de mantenimiento, sobre todo en el área de electrónica.
Expuso que una vez que se concreten los proyectos que se tienen con las instituciones de educación superior, financiados con fondos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) en unos seis años, se podrían abatir costos de financiamiento hasta en 30 por ciento
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